Corazón al Desnudo
Hoy abrimos las puertas de nuestros corazones
para dejar salir nuestro más noble sentimiento, lleno de emociones.
Al unísono, agradecemos a la flor más bella y hermosa de este mundo,
que por naturaleza le dimos un nombre: ella es mamá.
A ti, mi querida madre de mi corazón:
Agradecemos cada segundo de amor que nos has dado,
por tu comprensión y apoyo.
Las madres son, en nuestro camino, cada rayo de luz;
son el agua más pura de un arroyo.
Sostén de nuestra memoria y vida,
sin duda, a pesar de los años,
siguen siendo las mujeres más lindas.
No nos alcanzaría la vida
para agradecer tantas cosas que has hecho por nosotros;
y una de ellas es habernos dado la vida.
Por cada lágrima
o algún dolor, tus hijos te pedimos perdón.
Eres, madre de mi alma,
cada latido de mi corazón.
Es tu amor un misterio,
muy difícil de descifrar,
que se siente a través de las distancias,
sin importar el tiempo ni el lugar.
Es tu amor tan grande, madre,
madre de mi corazón,
lo más parecido al amor de Dios.
Muchas felicidades para todas las madres del mundo,
y para aquellas que han partido de este mundo,
desde aquí les decimos:
Gracias, mamá. Lo hiciste muy bien.
Te ganaste un 100 como madre,
y mientras vida tengamos,
nos sentiremos muy orgullosamente de ti.
Jesús Méndez Cepeda
“Corazón al desnudo”
